He hablado con algunos adolescentes y he sabido de otros que están muy felices con la cuarentena. El no tener que ir al colegio les resulta un gran alivio, por todo lo que implica: no ver a compañeros, a profesores, no tener que rendir evaluaciones o entregar trabajos, no tener que compartir en los recreos, mantenerse concentrado en clases… ¡woww! suena como un gran respiro.
El quedarse en casa con horarios flexibles, comida y dispositivos electrónicos a disposición y ma-padres-cuidadores que no pueden estar encima de ellos porque están DEDICADOS/ABRUMADOS con el teletrabajo y las tareas domésticas, les resulta una combinación perfecta e irresistible. Ellos son los adolescentes que aman la cuarentena.
Si bien la adolescencia es una etapa en la que las relaciones con los pares se vuelven centrales, siempre habrá quienes no se sientan parte de un grupo, o que tengan muy pocos amigos, o que no les agrade mucho su colegio, y para ellos este tiempo ha sido un sueño hecho realidad.
En estos casos, sería importante que de todas formas estos adolescentes:
- no se mantengan tan aislados del mundo exterior,
- que tengan contacto con otras personas ajenas a la familia, y
- que intenten mantenerse activos dentro del confinamiento.
Cualquier medida que ayude a conservar los vínculos, el movimiento y la motivación por algo, contribuirá a cuidar su salud mental.
También tenemos al otro gran grupo de adolescentes que están pasándolo realmente mal al estar privados de ver a sus amigos/as, pololos/as, al no poder carretear, o simplemente no poder tomar esa necesaria distancia de la familia para así sentirse más autónomos e independientes.
A todos esos adolescentes: F U E R Z A, recuerden que esto algún día pasará. RESISTAN para que el reencuentro con todo aquello que hoy está en pausa, valga la pena.
A todos esos padres: A G U A N T E, comprensión y atención a señales de alarma, respetando a la vez su privacidad. Ellos lo están pasando bastante mal por todo lo que han perdido y porque no pueden oponerse a lo que dicta el virus, aunque quieran.