Te ayudo a creer en tus capacidades, y a enfrentar las situaciones difíciles con valentía.
Mis pacientes dicen que soy experta en ansiedad social, que conmigo se sienten escuchadas y comprendidas, y que mi experiencia personal con la ansiedad es como un faro de esperanza para ellas, porque ven que sí es posible superar sus propios desafíos.
¿Te has sentido abrumada por la ansiedad social?
¿Te sientes mal físicamente al interactuar con personas?
¿Te duele la cabeza, estómago, se te acelera el corazón y se te aprieta el pecho? ¿Tienes otras molestias que no tienen una causa médica aparente?
¿Siempre estás imaginando que pasarán cosas terribles cuando tienes que relacionarte con otros?
¿Sueles pensar que tu desempeño va a ser desastroso, aun cuando estás en un lugar seguro y en un buen momento, e incluso si es que suele salirte todo bien? ¿Te criticas mucho por no poder estar tranquila con los demás? ¿Por no poder hablarles normalmente o hacer lo que quieres aun cuando estén mirándote?
¿Sueles huir de las situaciones en las que seas el foco de atención?
¿Evitas las situaciones sociales que temes, o buscas que te protejan, o que alguien haga las cosas por ti, por la ansiedad que te provocan? Por ejemplo, decirle a tu compañera que haga toda la disertación, o a tu colega que presente en la reunión todo el trabajo que tú hiciste.
Si respondiste que sí a alguna de estas preguntas, te recomiendo seguir leyendo.
Imagínate que un día te despiertas y ya tienes eso que estás deseando con tantas ganas. Ves la luz al final del túnel.
Imagínate que ya no sientes tanta ansiedad al hablar frente a otros. Te llevas mejor contigo misma. Te sientes segura. Ya no sientes pesada la vida. Ahora eres capaz de disfrutarla y vivirla como tú deseas, siendo tú la protagonista, y ya no esos incómodos síntomas que te hacen dudar de ti y sentirte avergonzada e insegura. Ahora sales más, das tu opinión, te juntas con gente, ya no te escondes e incluso te ríes más.
Hagamos una breve pausa de eso tan lindo que te estás imaginando para contarte un poco sobre mí.
Soy María Paz (pero me gusta que me digan Paz) y estudié Psicología en la Universidad de Concepción, porque desde siempre anhelé comprender el funcionamiento del cerebro y la mente humana.
Siempre me atrajo la mal llamada “enfermedad mental”, lo que hay detrás de lo que hacemos, el origen del sufrimiento humano, los traumas, y también por supuesto el poder encontrar maneras de sanarse y ayudar a sanar.
Desde pequeña experimenté ansiedad en carne propia, de las más diversas formas (y por supuesto sin que yo supiera que tenía ese nombre): ansiedad al separarme de mi mamá, nervios intensos al ir al jardín, al ir al colegio, al quedarme dormida, al hablar en público, conocer gente nueva, ir a lugares desconocidos, a la sangre, inyecciones, hospitales, etc.
Hoy me dedico a ayudar a personas que como yo, viven constantemente con esa compañera llamada ansiedad. Hoy éste es mi propósito, es lo que profesionalmente ME MUEVE y apasiona.
Porque realmente sé lo que se siente, y también sé que existen formas eficaces de lidiar con ella y poder llevar así una vida más tranquila, segura y plena.
Innumerables historias han pasado por mi consulta: he apoyado, abrazado, contenido, aprendido, guiado, llorado, enseñado, reído, sufrido y gozado. Todo gracias a cada una de estas almas que se han cruzado por mi camino como psicoterapeuta.
He sido testigo de cambios profundos en mis pacientes de todas edades. Acumulo miles de horas de psicoterapia, a lo largo de mis más de 15 años de ejercicio de la profesión. Tantas que cada vez que intento obtener un número, fracaso rotundamente... no puedo calcularlas.
La IA hizo un resumen de los testimonios de mis pacientes, y me dijo esto: "Paz Domarchi se destaca como una profesional que transforma vidas con su empatía y sabiduría". Wow. Qué tierna la IA jajaja
Te sigo contando sobre mi búsqueda
Comencé a trabajar el 2009 en el Hospital Regional de Concepción (Unidad de Psiquiatría Infanto Adolescente) y en consulta privada.
Me fui a Santiago el 2015, continué trabajando en el sistema público en el Hospital San Juan de Dios (Servicio de Neuropsiquiatría Infantil) y en mi consulta, donde comencé también a atender adultos.
Hasta que todo cambió
Fui mamá el 2017 y eso me revolucionó por completo. Dejé el hospital, para tener más tiempo para mi hija, y ahora solo me dedico a la práctica privada atendiendo ADULTOS (vía online), y a la crianza, obvio 😀 Ahora que ya es una escolar, y que tengo una segunda hijita, sigo rearmándome y "dando cara" a la maternidad (tarea nada fácil, pero que vale totalmente la pena).
Y sigo actualizándome para dar la mejor ayuda posible a quienes me consultan. Porque creo que siempre hay que darse tiempo para seguir estudiando y haciendo lo que una ama hacer.
En cuanto a mi formación profesional como psicóloga
Hice un postítulo en psicoterapia infanto juvenil en la Universidad de Concepción y luego cursé un diplomado en Psicoterapia de adultos en la Universidad del Desarrollo. Cada año tomo cursos de mis áreas de interés.
Estoy acreditada por la Comisión Nacional de Acreditación de Psicólogos Clínicos (CONAPC) de Chile como Especialista en Psicoterapia, y registrada en la Superintendencia de Salud de Chile (Nro: 82183).
De forma autodidacta y en especializaciones clínicas súper geniales y específicas he estudiado a fondo la ANSIEDAD y la ANSIEDAD SOCIAL, cómo opera en nuestro cerebro y afecta en las diversas áreas de nuestra vida, junto con cómo poder lograr reducirla y convertirla en solo un ruido de fondo.
Algo que me hizo tomar este rumbo fue que siempre quise “controlar” mi ansiedad, y mientras más lo intentaba, menos me resultaba. Y te adelanto que lo que más me ha servido fue ir al psicólogo y enfrentar mis miedos. Es mucho más fácil escribirlo que hacerlo, pero bueno, si yo estoy pudiendo, ¿por qué tú no?
Utilizo herramientas del Mindfulness, Terapia Conductual Dialéctica (DBT), Terapia de Exposición, Terapia de Aceptación y Compromiso, Terapia Cognitivo Conductual, Terapia Breve, Neurociencias, intervenciones informadas en trauma y otras terapias y técnicas basadas en la evidencia.
Las atenciones son vía online.