Testimonios de Pacientes

Bárbara
28 años

Después de buscar entre tantas ayudas, vi el Programa Segura y Libre como una oportunidad más real porque está especializado en ansiedad social, y sentí que ya no iba a seguir buscando.

Estaba súper triste, veía todo negro, insegura de mí misma, con una ansiedad constante que me hacía vulnerable en todo sentido.

Sentí que la Paz no iba a ser una más en mi lista de psicólogos, porque es dedicada y especialista.

Aposté todas las fichas y confié, y ahora tengo muchos más días de confianza en mí misma, y cuando hay ratos en que no, igual tengo una mentalidad más positiva y espero que mis días sean buenos o muy buenos, no como antes cuando esperaba que todo saliera muy mal.

Logré estar más en el presente, no deambular tanto con la mente y darme cuenta cuándo lo estoy haciendo para poder cambiarlo o buscar el por qué lo estoy haciendo y enseguida darme la solución y volver al presente.

Tuve cambios en los síntomas físicos, ya no siento el hormigueo en la cara, ya puedo controlar lo del pecho apretado, ahora lo enfrento; antes sentía que me iba a ahogar o desmayar, y ahora solo es una molestia leve que se va muy rápido.

Ha cambiado mi forma de expresarme con el resto. Me he atrevido, he sido valiente para hacer otras cosas, empecé a ir al gimnasio sola y a estudiar algo que me encanta; también ahora respondo cuando siento que algo no está bien, pero controlándome, antes lloraba y se me salía toda la ira en un revoltijo.

Estoy más empoderada, más agradecida, más consciente.

Mi estado de ánimo mejoró y cuando me voy abajo lo manejo distinto y me hablo con más amor.

Paz, gracias por enseñarme a respirar con la guatita para afuera, por hacerme ver la paleta de colores más variada, y por ayudarme a reconocer mi valentía.