Quizás te has preguntado alguna vez lo siguiente: ¿Soy introvertida, soy tímida, soy ansiosa, o solo ansiosa socialmente? ¿O alternativa E, todas las anteriores?
Tanto concepto y esto que siento que no me lo explico. Pues aquí te contaré cuál es la diferencia entre timidez, introversión y ansiedad social, y así, si te pasa algo de esto, te puedes ir conociendo mejor.
Tanto la ansiedad generalizada como la ansiedad social tienen en común que hay preocupaciones persistentes y excesivas en relación a una amenaza percibida.
Pero la ansiedad generalizada aparece como una ansiedad o preocupación crónica, mientras que la ansiedad social involucra una excesiva auto conciencia (o auto observación) en situaciones sociales.
En otras palabras, las situaciones sociales causan ansiedad mientras que otras circunstancias no.
¿Es la ansiedad social solo timidez?
Esa es una de las preguntas que hacen que muchas personas que tienen ansiedad social esperen largo tiempo para buscar ayuda.
Asumen que solo son tímidos y no reconocen la magnitud del impacto que esta condición tiene en su vida cotidiana.
Pero mientras la timidez y la ansiedad social comparten características, lo que distingue a la ansiedad social es la intensidad del miedo que produce y lo lejos que una persona irá para evitar la posibilidad de ser juzgado o rechazado.
Por ejemplo, si eres tímido, puedes sentirte incómodo al ir a una fiesta de cumpleaños de un amigo, pero obligarte a ir, y finalmente terminas pasando un buen rato.
Pero si tienes ansiedad social, probablemente te sentirás nervioso solo leyendo la invitación, y… probablemente no asistirás.
¿Y la introversión?
La introversión, por su parte, es un rasgo de personalidad que es distinto a la ansiedad social.
La introversión es una preferencia por un bajo nivel de estimulación —preferir una tranquila noche en casa en vez de una noche afuera en una disco.
Un introvertido invitado a un cumpleaños puede ir por un rato e irse cuando ya tuvo suficiente. O podría elegir no ir —no para evadir la incomodidad y el malestar, pero sí porque no está con ganas de recibir ese nivel de estimulación, o siente que se le va a drenar toda su energía.
Si tienes ansiedad social, no es inusual sentirse sin esperanza y sin valentía, porque has estado lidiando con el problema por un largo tiempo, sin ninguna mejora.
Si has estado luchando para cambiar las cosas, no te preocupes. Existen muchas herramientas efectivas que puedes aprender a usar y sentirte mejor rápidamente, y con práctica, puedes ganarle a tu ansiedad social y conectarte con otros con facilidad.
Me gustaría iniciar una psicoterapia para mi ansiedad social.